Tiembla la tumba de Sampay. La constitución de Robledo.

El Secretario de Desarrollo Local, Producción y empleo del Municipio de Quilmes Guillermo Robledo, publicó en este diario una solicitada ejerciendo su derecho a réplica. La misma incluye aclaraciones respecto de su patrimonio y su condición de Quilmeño.

 Sobre los rumores de un posible alejamiento (generados por reiteradas ausencias en su despacho municipal)  declara que “estamos elaborando, por eso no me ven calentar las sillas habituales” y “para que todos sepan, hoy estamos diseñando dos nuevos objetivos desde el municipio”.

 El primero de los objetivos mencionados es una presentación ante la justicia de 62.304 fojas del Plan Argentina Trabaja, lo cual parece más una defensa jurídica personal que un “objetivo desde el municipio”. Los interesados en este "objetivo" pueden consultar la edición anterior de El Suburbano.

 El segundo objetivo mencionado por Robledo lo transcribimos a continuación: “En segundo lugar la dirección de Nuevos Paradigmas de mi Secretaría ha terminado los argumentos y fundamentos para la Reforma Constitucional urgente que necesita nuestro país. Con ideas nunca percibidas ni concebidas, ni hechas públicas hasta el presente. Una reforma constitucional para todos y todas. No para una persona. Para la patria y las próximas generaciones. Quilmes va a presentar una reforma constitucional que cambia los ejes del debate en nuestro país”.(?)

 Me preguntaba si ese “objetivo” descomunal no excede las competencias de la comuna (discúlpenme el juego de palabras). A nuestro Secretario de Desarrollo no parece excederlo. Tal vez porque una secretaría le quede chica.

 En otra parte de la solicitada Robledo señala que “la burocracia y la política berreta dilataron la velocidad de algunas iniciativas” menciona: Puerto de Quilmes, Consorcio de Municipios Costeros, Consorcio de COMCOSUR para obra pública común, asfaltos para todo Quilmes, Regulación del Parque Industrial, Parque Industrial de la Bernalesa… Robledo, por supuesto, no cree formar parte de “la burocracia y la política berreta”. Los dos objetivos que menciona en la solicitada, jurídicos, sorprendentes, monumentales, desmesurados, hacen suponer lo contrario.

 Ojalá que los rumores del alejamiento del funcionario, de ser fundados, se concreten con posterioridad a la culminación y presentación de esta obra constitucionalista. Para l el desarrollo de todo el pueblo de Quilmes, si se me permite la ironía.