La confianza en su piso se llama este trabajo que publica
Perspectiva Sur.
Es bueno el repaso. Debería incluir el dato de los votos
obtenidos por los oficialismos en el momento en el que les tocó perder (todos
los oficialismos perdieron, menos uno, ejem). En el final el cronista
lamentablemente derrapa. Al margen de las omisiones y de la conclusión final,
la nota es un logro.
Intenta demostrar (y
lo logra con números) que la crisis del 2001 provocó una merma en el apoyo a
los oficialismos locales producto de las dispersiones, rupturas y suicidios
en el sistema de representatividad.
Sumo a este parecer
el dato no menor que Gutiérrez renovó su mandato en ese contexto. Logro inédito
y con menor aceptación popular que la obtenida por algunas de las anteriores
experiencias oficialistas en una elección de medio término. Agrego, además,
como hipótesis personal, que tal vez esa dispersión política local (en las
últimas elecciones se presentaron 27, 28 o 29 candidatos a Intendente) haya
sido una de las razones que explican la
reelección del Intendente, aunque resulte a priori paradójico. El
razonamiento sería el siguiente, pasando a limpio: la dispersión de la
oferta electoral merma la cantidad de apoyos oficialistas, pero a su vez
propicia la reelección.
Destaco la nota, porque sé que no es fácil ponerse a indagar
sobre los votos históricos desde el 83 hasta la actualidad. Lo que quiero decir
es que lleva tiempo y trabajo hacer una nota así: armar el cuadrito, volcar los
datos en palabras, hacer la cuenta sobre los porcentajes y sacar conclusiones
más o menos coherentes.
Independientemente de
lo que yo piense, que no tiene por qué importarle a nadie, valoro el trabajo,
que además tiene la virtud de la originalidad.
"…Hasta hace semanas, Sergio Villordo estaba
maldecido, no podía asomar las narices, las encuestas lo aniquilaban, la gente
no lo quería. Hoy, su lista (y por favor terminemos con el eufemismo de “la
lista de Queijeiro”), pelea mano a mano con el oficialismo. Por supuesto,
se sube a la ola del “massismo”, pero es obvio que en esa ola no se hunde"
dice Cristian Skrilec en esta nota de El Suburbano
Me gustó la metáfora de la ola, pero más me gustó que
uno de los principales editorialistas que tiene la ciudad (la otra es Andrea
Frade) insista en la confirmación de que esa lista es eeeesa lista: la de
Villordo. No sé a quién se lo pide Skrilec, esto de terminar con el eufemismo.
Terminemos, dice.
Por mi parte, últimamente percibo que algunos
“renovadores” locales (incluido el propio Queijeiro) comenzaron a promover el
corte de boleta en la lista diputados provinciales, de la cual forma parte (ahí
si) explícitamente Villordo, en el séptimo lugar, un lugar expectante, como
una forma de desligarse de la figura del ex intendente. Y todos sabemos que
no se puede estar medio embarazado. El silencio se puede mantener...solo por un
tiempo.
Villordo no solo es
el armador político de la lista local, sino que también es uno de los
principales armadores políticos del Frente Renovador en la tercera sección
electoral, lugar en el que están habilitadas para votar 3.800.000 personas,
nada menos.
Es destacable,
además, porque muchos comunicadores del distrito, que otrora hablaban pestes
del empresario inmobiliario, ahora padecen amnesia, o algo similar. Que se
mejoren prontito. Terminemos.
Alguien puede chequear por mi e informarme si el Clarín
Zonal también es parte la
corpomononopolicaconcentradaquetienequedevolveralosnietosqueserobóCathalinaGlugiapuntadelapicerasquedisparanbalasdetintaquevolteangobiernoscontrestapasnegativasporquetodolovennegativocomoTNparadefendersusinteresesconcentrados.
Ojalá que no (no parece)
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