El voto electrónico, esa supuesta panacea electoral, tiene algunos defectos. Algunas cosas para pensar que no suelen ser comentadas.
La primera es la
separación de la boleta sábana en unidades electorales aisladas.
A mí me gustan las
boletas "sábana", aunque sea políticamente incorrecto confesarlo. Me gustan,
puesto que son en si mismas un mensaje, que masomenos sería este: usted está eligiendo un proyecto político. Es
claro para mí que, cuando elegimos Intendente y concejales, esa elección forma parte de un
contexto político más amplio. El municipio se ubica dentro de una sección electoral, que
está adentro de una Provincia, que está adentro de un país. La boleta sábana es
la manifestación electoral de esa integración política (partidaria).
El voto electrónico rompe esa integración, pero además afecta la elección de los cargos electivos locales (Santa Fé es ejemplo de esto, mostrando una disminución de los votos obtenidos para todos los cargos legislativos, cargos que no cuentan con la promoción ni la publicidad de los candidatos a cargos Nacionales) En cambio, con la boleta sabana, esos cargos locales se "alimentan" (con total derecho, son del mismo partido) de las opciones políticas que las traccionan a nivel provincial y
nacional. Este apartado, por lo menos, merece una discusión amplia: ¿Qué
significa en lo político la boleta sábana? ¿Qué significa en lo político desagregar
los cargos electorales? Los que exigen el voto electrónico no reparan en esto.
Lo segundo. A mi me gusta que sea la gente (o el pueblo,
depende quien lea) el encargado de fiscalizar su propia elección. Los sistemas
electrónicos anulan esa posibilidad, que constituye una forma de incentivar la participación popular. Cabe preguntarse: cuántas personas serán,
en el mecanismo del voto electrónico, las encargadas de decir que “salio todo
piola”, o que en dos mesas de Necochea ganamos. ¿O quiénes serán?. Miren, yo prefiero sentarme todo un día en una mesa electoral, y al
finalizar la jornada, contar cuantos votos sacó el partido al que le pongo mi confianza. Y no me interesa que
sea una empresa (porque las máquinas y los sistemas electrónicos los pone una empresa, y yo desconfío de
las empresas primero y de las tecnológicas desconfío dos veces). Retomando, no quiero que sea una
empresa o un grupo reducido de expertos los que vengan a decirnos quién ganó y
quien perdió.
Esta semana leí en www.eldiariodequilmes.com.ar una carta de la
Secretaría de Prensa – Comité del Distrito UCR Quilmes, que se
titula catastroficamente “Sin el voto electrónico estaremos condenados al fraude”, que describe,
peyorativamente, lo siguiente: el sufragio se
realizará mediante el sistema de boletas “sábana” pre impresas, sobres, urnas
de cartón, planillas completadas a mano, traslado físico de estos y conteo semi
manual. Todo un proceso electoral plagado de anacronismos, y con infinitas
posibilidades de prácticas fraudulentas de principio a fin.
Eso
que el Comité del Distrito de la
UCR llama “anacrónico; fraudulento; a mano; urnas de cartón”,
todo eso, son personas ejerciendo su derecho a contar los votos. Cómo vamos a
confiar en la gente! habiendo máquinas o robots, mucho más republicanas que un ciudadano.
Lo de "urnas de cartón", bueno, pensabamos dejarlo pasar pero ¿de qué querés que sean las urnas, de hormigón armado?
Lo de "urnas de cartón", bueno, pensabamos dejarlo pasar pero ¿de qué querés que sean las urnas, de hormigón armado?
No estaría mal que el Comité de Distrito de la UCR se preguntara cómo viajan los datos electorales vía sistema
electrónico, ¿quién los controla? Cuando
hablamos de voto electrónico o voto “a mano”, hablamos de quiénes fizcalizan nuestra elección. Este blog elige la segunda opción: que sean los ciudadanos los
encargados de esa tarea.
El problema (real) es que algunos partidos, lamentablemente, ni
siquiera pueden garantizarse esa mínima tarea. Mínima, comparada por ejemplo, con gobernar, que es a lo que se aspira.
Luego el comunicado incurre en un sinfín de inexactitudes, de cosas que malintencionadamente no se dicen, y que están
ligadas a la instalación de la posibilidad de un fraude electoral. Esa es su finalidad. Abajo pego la carta completa. Pero antes...
Algunas consideraciones más:
“Entre los casos más elocuentes
de problemas con el voto electrónico, está el de Holanda, que dejó de
implementarlo en 2008, y el de Alemania, en donde el Tribunal Constitucional,
en 2009, lo declaró inconstitucional.” Bueno, este párrafo anti voto electrónico lo saqué de esta nota http://www.lanacion.com.ar/1592681-debilidades-del-voto-electronico
que fue publicada en el republicanísimo diario La Nación. La misma nota encara la
problemática de los Hackers. Leemos:
“Entre las debilidades del "voto
electrónico" se destacan
potenciales afectaciones a la integridad del sistema electoral y al secreto del
voto. Y menciona algunas “filtraciones” ocurridas en los comicios de
Brasil. También menciona el problema de “la distancia entre el elector y la auditoria del acto comicial, puesto que sólo expertos en informática pueden
realizar este tipo de control”.
La nota de La Nación tambien habla de las desafortunadas palabras del Presidente Maduro, que declaró que conocía quienes eran los "traidores" que no lo habian votado... una pinturita el voto electrónico.
“Este perverso sistema, funcional a la trampa y las triquiñuelas”, digo, el de recurrir al miedo para deslegitimar, sin argumento alguno, una elección popular, es más viejo que el viento. Y sigue soplando
La nota de La Nación tambien habla de las desafortunadas palabras del Presidente Maduro, que declaró que conocía quienes eran los "traidores" que no lo habian votado... una pinturita el voto electrónico.
“Este perverso sistema, funcional a la trampa y las triquiñuelas”, digo, el de recurrir al miedo para deslegitimar, sin argumento alguno, una elección popular, es más viejo que el viento. Y sigue soplando
(09-07-2013) Este año los argentinos concurriremos una vez más a
las urnas y emitiremos nuestro voto, primero en las Primarias Abiertas
Simultaneas y Obligatorias del 11 de Agosto, y luego nuevamente en las
Elecciones Generales del 27 de Octubre. También una vez más, el sufragio se
realizará mediante el sistema de boletas “sábana” pre impresas, sobres, urnas
de cartón, planillas completadas a mano, traslado físico de estos y conteo semi
manual. Todo un proceso electoral plagado de anacronismos, y con infinitas
posibilidades de prácticas fraudulentas de principio a fin.
Se estima que solamente en la
Provincia de Buenos Aires, cada frente electoral necesitará
40.000 fiscales para controlar 32.000 mesas de votación. Un enorme caudal de
personas, simplemente para garantizar que solo una parte del escrutinio sea
auditado y procurar así, que los votos emitidos por los ciudadanos no sean
alterados. Digo solo una parte, porque una vez que las urnas y las planillas son
entregadas al Correo Argentino (controlado por el Gobierno Nacional), entran en
una especie de agujero negro exento del control de los partidos políticos y la
ciudadanía.Este perverso sistema, funcional a la trampa y las triquiñuelas, es una verdadera pérdida de calidad institucional, puesto que facilita las posibilidades de fraude electoral y con ello el debilitamiento de la República.
En este contexto, la instauración de un sistema de votación electrónica es absolutamente necesaria, para desterrar prácticas electorales que atentan contra la Democracia. Además, es de implementación totalmente viable, pues requiere una tecnología al alcance de cualquier país medianamente desarrollado como el nuestro. A su vez es muy simple su entendimiento y utilización por parte del ciudadano, puesto que emite su voto, con indicaciones claras y sencillas a través de terminales similares a un cajero automático. Tengamos en cuenta que hoy día, son numerosos los países de América Latina que lo han incorporado, incluso algunos con un grado de desarrollo tecnológico muy inferior al de nuestra Nación.
La única explicación posible al mantenimiento del anticuado sistema de votación que se utiliza en nuestro país, sería directamente facilitar la concreción de maniobras espurias tendientes a eventualmente alterar los resultados de los comicios. Dichas acciones conocidas por todos, tales como el hurto y/o adulteración de boletas y planillas y el “voto cadena”, más el traslado de urnas y planillas hasta los centros de cómputos, serían desterradas de cuajo con un sistema de votación electrónico.
Por todo ello, los ciudadanos debemos exigir a través de los distintos medios que se encuentren a nuestro alcance, la inmediata incorporación en las legislaciones nacionales y provinciales, el sufragio por medio del “Voto Electrónico” y la posterior implementación efectiva de sistema. Mientras tanto, quedará en manos de los ciudadanos, comprometerse con la República y contribuir al control del acto eleccionario actuando como fiscales. Será esta, la única forma de poder avanzar en el sendero de la Democracia verdadera y el respeto de la voluntad real de las mayorías.
SECRETARÍA DE PRENSA - COMITÉ DE DISTRITO U.C.R. QUILMES
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