Reflexiones sobre el conflicto en el Isidoro Iriarte

 No parece desatinado que los trabajadores del Hospital Isidoro Iriarte (o de cualquier otro hospital público) formen parte de la mesa de negociación a la hora de elegir al nuevo director del nosocomio. En la designación para ocupar ese cargo del Dr. Gustavo Wahnschaffe (Ex director del Oller de Solano) los trabajadores enrolados en los gremios ATE y CICOP no fueron siquiera consultados.
 El Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires y el Municipio de Quilmes no están obligados a hacer participes a los gremios de esa decisión pero intentarlo, muchas veces, evita conflictos. No hubo intento.
 Los gremios se oponen a la designación de Wahnschaffe. Entre otros argumentos, sostienen que el futuro director del Iriarte debe ser alguien proveniente del “riñón” del hospital y no un profesional de afuera.  Es un argumento atendible que habilita la discusión. Lamentablemente los gremios no fundamentan de qué modo ese tipo de designación beneficiaría el funcionamiento del hospital.
Si beneficiaría, por supuesto, los intereses gremiales, que no quieren perder el control que ejercen sobre el funcionamiento del Iriarte. La designación de Wahnschaffe viene a amenazar ese control gremial.
 La relación entre el Gobierno Municipal y ATE, se sabe, no es buena. 2013 es un año electoral dentro del gremio. El Gutierrismo intentará destronar a las hermanas Guillen, conductoras actuales de ATE Quilmes, apadrinando la lista AZUL que sería encabezada por un funcionario municipal.
 El Gobierno de Gutiérrez intenta poner un pie dentro del Hospital pisando fuerte. Los gremios hicieron saber que no será tan sencillo. Si ATE o el Municipio ejercen la dirección es lo que se discute, no otra cosa. En el medio los usuarios del hospital, sin voz ni voto.
Hasta el día de la fecha los gremios no iniciaron medidas de fuerza que perjudiquen el funcionamiento del nosocomio, que funciona con normalidad. Esa es una decisión valorable y a destacar. Esperemos que se mantenga en el tiempo, de perdurar el conflicto.
 En la vorágine discursiva algunos gremialistas maltrataron injustamente la figura del Dr. Wahnschaffe. Injustamente, porque la discusión no es Wahnschaffe SI o Wahnschaffe NO: Es ATE o Municipio. Los personalismos deben permanecer al margen. Al fin y al cabo se trata de un colega.
 Para finalizar diré que no es necesario ser un trabajador de la salud para dirigir un hospital. Del mismo modo que no es necesario ser payaso para convertirse en el dueño de un circo.

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